
Fue una experiencia tensa por momentos, dada la cercanía
física de las manifestaciones abortistas, que tenían lugar frente a la retreta
de la Plaza Libertad. Aún así, soportando la gritería y el humo de las fogatas
donde quemaban simbólicamente al "Patriarcado", estuvimos marcando
presencia.
Al finalizar la misa, el Padre Gordillo nos saludó y nos
impartió su bendición, alentándonos a continuar en esta cruzada por y en favor
de la vida.
Luego, junto a un grupo de militantes pro vida y otros asistentes, rezamos el Santo Rosario, sobreponiendo la fuerza de la Oración
al la violencia de los cultores de la muerte.
Esta acción militante en contra del crimen del aborto, sumada a otras que desde hace tiempo
viene realizando el nacionalismo santiagueño en ese mismo sentido, demuestran nuestro inquebrantable
compromiso en defensa de los derechos de Dios, la Patria y la Familia.
Hugo Alejandro Acuña
Fue un honor compartir ese momento Camaradas...
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